Hace unos días un lector y oyente, me propuso escribir sobre “El malentendido de la soledad”, así él lo llamó. 
 
Creo que no voy mal encaminada, si considero que se refiere a la soledad como un malentendido, debido a que vivimos en una sociedad donde tenemos que tener constantemente a personas a nuestro alrededor, ya que si no es así, se considera de forma generalizada que no estamos bien o que nos falta algo para sentirnos bien o para estar mejor. 
 
En varias de mis apariciones en redes sociales, he dicho que “Somos nuestra mejor compañía” es decir, que tú mismo/a eres tu mejor compañía. Somos muy buena compañía para nosotr@s mismos, así lo he comprobado en mi caso de primera mano. Ahora bien; ¿Qué ocurre, cuando así no lo consideramos? ¿Cuál es el motivo por el que los seres humanos creemos que debemos estar siempre acompañados para estar bien y para sentir-nos a gusto? 
 
Durante estas fiestas navideñas, hay personas que han estado rodeadas de otras muchas personas, amistades, familia, compañeros/as de trabajo… Recibimos muchos estímulos externos, y todo esto hay que asimilarlo, procesarlo, digerirlo. Algunas de estas personas están encantadas con este ritmo de actividad social, aunque otras preferirían menos intensidad de relaciones. Otros pasan días señalados en soledad, y está bien siempre que así lo hayan decidido, y está aún mejor si saben estar a gusto en soledad. 
 
Cada uno tiene un grado de necesidad de acompañamiento distinto. Si este grado es muy alto será bueno tener la opción de estar muy acompañados. Si este grado es más bajo, procuremos rebajar la intensidad de intercambio de tiempo con muchas personas. Debemos conocernos y buscar lo que nos viene y nos sienta bien. Decir sí o decir no a estar con los demás, y eso lo descubriremos pasando tiempo con nosotr@s mism@s. 
 
Para las personas que se sientan saturadas, ya que me han llegado ya testigos de este tipo, les invito a reflexionar el por qué y tratar de encontrar la medida justa para cada uno de vosotr@s, pues no es aconsejable que nos forcemos a interaccionar socialmente. 

Espero que hayáis gozado de unas fiestas agradables. Os deseo otro tramo de recorrido en vuestra gestión emocional para este 2023 que nos permita a tod@s estar menos atascados.